Primera clasificación Vida nocturna en Nueva Orleans

Quienes están en Bourbon Street y se le hayan cansado los pies ​​de caminar, y quiera reponer algo de energía, sólo necesitan caminar un poco más lejos para encontrar este famoso bar. Lafitte's Blacksmith Shop está (como su nombre lo indica), ubicado en un antiguo taller de herrería y refugio para los contrabandistas durante los años 1800. Dice ser el único edificio que sobrevivió al incendio que quemó el Barrio Francés a finales de 1800. En la parte trasera del bar, un anciano toca un gran piano y canta canciones como Piano Man y You've Lost That Lovin' Feeling. El bar cuenta con bebidas baratas en comparación con muchos de sus homólogos de Bourbon Street, y nunca hay que pagar entrada. Abre todos los días a partir de las 11 hs.

Hay varios bares en Bourbon Street que son difíciles de distinguir después de varias bebidas. Razzoo Club & Patio se distingue de los demás con un patio trasero increíble, una amplia zona de descanso y música en vivo que suele ser bastante buena. Los músicos tocan con el alma, lo cual es poco común en Bourbon Street. Los precios de las bebidas son razonables y hay un ‘happy hour’ de tres por uno todos los días.

Detrás de la barra de Cure no se pueden encontrar tragos comunes ni cerveza de barril, en cambio, su carta ofrece cócteles cuidadosamente elaborados con productos de primera calidad, así como una selección de las mejores cervezas embotelladas. Este elegante bar de la parte alta de la ciudad, ubicado en un cuartel de bomberos cuidadosamente restaurado, cuenta con techos altísimos y arcos pintorescos, un acogedor patio para las noches agradables. Los clientes hambrientos pueden satisfacer sus antojos con alguno de los pequeños platos que ofrecen. Cure es un bar libre de humo.

Avenue Pub tiene un menú para satisfacer los antojos de comida a cualquier hora del día o de la noche, un lugar muy conveniente para la ajetreada vida en la ciudad. Este pub con sabor local ofrece una buena selección de bebidas y comidas, con una mesa de billar y una máquina de discos que proporcionan entretenimiento. Aquí siempre se encuentra gente interesante y turistas ocasionales, todos pasan un buen rato en este encantador refugio. Se puede sentar en los ventanales que dan a Saint Charles Avenue y ver el mundo pasar mientras se disfruta de una bebida fría y una comida. No hay nada más refrescante que eso.

Inspirado en las tradiciones cajún ancestrales de compartir la comida entre todos los participantes del festín, Bourrée at Boucherie se traduce como "carnicería". Es uno de los sitios más populares entre la gente de la zona cuando asoma la necesidad de comer delicias sureñas. El menú está influenciado por las experiencias personales del chef Zimet cuando exploró las diversas opciones culinarias de Carolina del Norte antes de comenzar esta aventura. Los precios son bastante asequibles, algo que se suma a la sonrisa que verán en el rostro de los comensales mientras disfrutan de la comida.

The graffiti-covered exterior of this quaint restaurant is sure to catch your attention while strolling on the Jackson Avenue. As you step inside, you are welcomed into a disarmingly simple setting where pleasingly compensates for the lack of frills. At Jackson Turkey and the Wolf, sandwiches take center stage with options like the lemony yogurt infused lamb neck roti and the smoked ham laden Virginia french roll waiting to delight your palate. Cocktails such as the interesting blue curaçao and coconut milk concoction and the Julie And Candy quench your thirst and complement every item on the menu. If you have arrived with kids, the cute animal-shaped table numbers are sure to fancy them along with the limited but delicious selection of desserts served here.