Este restaurante francés de buena reputación ubicado en la Vieja Ciudad ha sido galardonado en varias ocaciones por su cocina simplemente exquisita. El encantador salón comedor de Saint-Amour está ambientado con paredes de piedra, flores y espejos refinados y románticos. El restaurante se especializa en mariscos y pescados, como pez espada con pimientos dulces en salsa de crema, carnes como caribú asado con peras escalfadas y mermelada de cedro, costillar de cordero con crout de finas hierbas y queso, y el famoso foie gras de pato de Quebec. Los postres son espectaculares y la carta de vinos ofrece un Sauternes Chateau La Tour de 1928.
Los propietarios Daniel Vézina y Suzanne Gagnon le pusieron el nombre de sus dos hijos a este restaurante popular y de categoría. La amistosa pareja es famosa en la ciudad por su gran personalidad y la calidad de su cocina. Ofrecen menús fijos además de a la carte que cambian según la estación y que permiten que el comensal pruebe lo mejor de cada temporada. Algunas de las delicias son la confitura de pato, los ravioles de espinaca y citrus con foie gras asado, el cóctel de camarones y el tempura de vegetales con salsa de radicheta. La sección de postres cuenta con varios deleites como el souffle de naranjas. La bodega es impresionante e incluye botellas provenientes de una amplia gama de paises.
Nacido en 1984, Restaurant L'Echaudé fue un sueño concevido por cinco amigos de viaje que compartían la misma pasión por la comida. Con ideas traidas de Nueva York y París, crearon Restaurant L'Echaudé. El lema del restaurante es "comida de calidad a precios asequibles". El menú es de estación y la base de cada plato son ingredientes locales orgánicos y de estación. Los vinos también provienen de viñedos selectos. Buena comida, un ambiente con clase y un servicio meticuloso son los tres motivos por los que tienen una clientela fiel. El bistro abre siete días a la semana; el brunch se sirve a partir de las 10 de la mañana los fines de semana, el almuerzo a partir de las 11.30 de lunes a viernes y la cena a partir de las 5.30. Después de las 9 de la noche, todos los platos del menú tienen un 21% de descuento.
Aux Anciens Canadiens es un restaurante muy famoso ubicado en la bellísima Maison Jacquet, un edificio de 1675 que fue el hogar del novelista Philippe-Aubert de Gaspé. Su novela le da el nombre al restaurante. La table d'hôte ofrece una entrada, una sopa, un plato principal a elección, postre y café o té. Gran parte de la cocina es tradicional de Quebec, fuertemente influenciada por el estilo franco-canadiense y bien diferenciada de la francesa típica.
Ubicado en el corazón de la Vieja Quebec, cerca del Château Frontenac, este famoso restaurante francés se situa en una elegante mansión victoriana construida en 1845. Le Continental ofrece una decoración elegante y sobria, con colores oscuros y detalles en roble. Durante su historia, la cocina y el servicio han recibido varios premios nacionales e internacionales. El menú está compuesto por clásicos como caracoles en salsa de crema y ajo servidos en su concha y muchas otras preparaciones.
Ubicado en el Best Western Aristocrate Hotel de Sainte-Foy, este restaurante recibe su iluminación de los grandes ventanales. Si bien el ambiente es muy elegante y refinado, el clima es relajado y el servicio es impecable. El salmón es una de las especialidades de la casa, y se sirve escalfado o asado. Los Tables d'hôte se pueden armar con cualquier plato principal para satisfacer a todos los paladares. El restaurante ofrece distintos menús para el desayuno, el almuerzo y la cena, y también cuenta con una carta de vinos excepcional.
Famosa por sus preparaciones artesanales, Eric Borderon es un reconocido chef patisserie francocanadiense. Su boulangerie en Sillery es una de las más buscadas debido a su gran variedad de panes y pasteles recién horneados. Además de la gran selección de delicias horneadas, este pequeño espacio sirve almuerzos suntuosos, ensaladas y emparedados gourmet. Abierto toda la semana, Eric Borderon les promete el almuerzo perfecto.
A pride of the Saint-Roch neighborhood, Le Clocher Penché is a charming bistro that serves a brilliant contemporary European fare. The daily-changing menu comprises of French classics prepared with innovative, modern flair, using locally sourced, artisanal ingredients. Everything offered on the menu here is exquisite and the service, friendly and warm; yet this beautiful place eliminates the unwanted pretensions that one usually associates with such establishments. Worth trying here is the prixe fix brunch, something of a super power of Le Clocher Penché; drop in for a truly wonderful meal.
Le Nektar les ofrece una experiencia de café completa. La cafetería ofrece variedades provenientes de las mejores moliendas del mundo, e incluyen variedades de África, América y hasta de algunos países de Ásia. Cada uno de los cafés que se sirven aquí tiene un sabor y una riqueza únicas, y eso es porque se lo prepara siguiendo un procedimiento meticuloso. Le Nektar es una verdadera experiencia de café y es un lugar imperdible para los connoisseurs de café.
Le Pied Bleu serves more comfort than gourmet food at reasonable prices. Located near St. Roche, this cute little restaurant serves delicious, wholesome food - like the kind Grandma made, that would just melt your heart. The simple, uncomplicated menu comprises of popular dishes that are served in charming vintage crockery. A warm, friendly service amidst warm, friendly environment serving homey grub makes Le Pied Bleu the way to go when you're done with the whole fine-dine bit.
Este restaurante francés de buena reputación ubicado en la Vieja Ciudad ha sido galardonado en varias ocaciones por su cocina simplemente exquisita. El encantador salón comedor de Saint-Amour está ambientado con paredes de piedra, flores y espejos refinados y románticos. El restaurante se especializa en mariscos y pescados, como pez espada con pimientos dulces en salsa de crema, carnes como caribú asado con peras escalfadas y mermelada de cedro, costillar de cordero con crout de finas hierbas y queso, y el famoso foie gras de pato de Quebec. Los postres son espectaculares y la carta de vinos ofrece un Sauternes Chateau La Tour de 1928.
Los propietarios Daniel Vézina y Suzanne Gagnon le pusieron el nombre de sus dos hijos a este restaurante popular y de categoría. La amistosa pareja es famosa en la ciudad por su gran personalidad y la calidad de su cocina. Ofrecen menús fijos además de a la carte que cambian según la estación y que permiten que el comensal pruebe lo mejor de cada temporada. Algunas de las delicias son la confitura de pato, los ravioles de espinaca y citrus con foie gras asado, el cóctel de camarones y el tempura de vegetales con salsa de radicheta. La sección de postres cuenta con varios deleites como el souffle de naranjas. La bodega es impresionante e incluye botellas provenientes de una amplia gama de paises.