No hace falta viajar al Sur Profundo de los Estados Unidos para experimentar una tradición culinaria que rara vez se ve en otros lugares. Tal vez por una buena razón. Este lugar fue catalogado por la revista Rolling Stone como "el mejor restaurante para comer salchichas con legumbres y escuchar música deep house", y sirve comida chatarra recalentada (macarrones con queso, papas fritas, platos precocinados, etc.). Aquí tocan DJs todas las noches y cuenta con una barra completa, música y mucha energía, que hacen que el lugar tenga una atmósfera ideal.
Bender's es una leyenda de Mission. Quedó en el olvido en 2006, pero sus fundadores unieron sus fuerzas, y con el apoyo de la comunidad, reabrió un año y medio más tarde, más grande y mejor que nunca. Algunos restos del incendio se conservan como "trofeos" de la victoria del lugar sobre la tragedia, y es digno de ver. Cómodos sillones rodean la mesa de billar y la parrilla, que es manejada por la gente de Weird Fish. Para más detalles, consultar el sitio web.
Bourbon & Branch es de lo que habla toda la ciudad y se encuentra ubicado de manera inadvertida en una esquina de Tenderloin. El lugar no cuenta con ninguna señalización y la puerta se cierra firmemente. Al sonar el timbre, la puerta se abre y se pide la contraseña. Si no hay contraseña, la puerta se cierra de golpe. Suena cruel, pero una vez que uno se toma el tiempo para registrarse en el sitio web, hacer la reserva y recibir la contraseña, se da la bienvenida al mundo del placer y el alcohol. El ambiente es un homenaje a los bares clandestinos de la época de la prohibición, aunque con un toque moderno y urbano. La carta de bebidas es amplia e innovadora. Los destacados incluyen no sólo uno, sino toda una selección de whiskys americanos artesanales, además de una lista de whiskys, rums y tequilas raros que completan la carta. Los camareros son maestros cocteleros, que preparan tragos con ingredientes altamente tentadores. Consultar el sitio web para reservas en línea y una lista completa de las reglas del lugar.
Se trata de Haight-Ashbury, por lo que no hay mejor música para flotar en el aire mientras se toma unas cervezas artesanales que los Grateful Dead, en este lugar que era conocido en los años 60 como el Drug Store. La remodelación ha logrado que el ambiente luzca menos psicodélico, aunque hay un exuberante mural en la pared, y Jerry y los chicos siempre están en la lista de temas que lo llevan a uno de vuelta al Summer of Love (Festival Verano del Amor). Eso crea un ambiente suave que invita a comer enormes sandwiches, platos de salchichas, tazones de sopa sustanciosa y bocadillos tentadores como patatas fritas y aros de cebolla. El servicio de los camareros es amable y la atmósfera es siempre la de 1967.
Speakeasy Ales & Lagers es una cervecería abierta a todo el mundo. Un lugar para relajarse y disfrutar de las distintas variedades de cervezas tipo ale o lager. Aquí se puede pasar un rato con amigos adentro, o simplemente dirigirse al patio y ver otra cantidad de gente. Esta cervecería está mucho más allá que cualquier otra donde hacen aburridos tours, ya que aquí se llevan a cabo muchos eventos interesantes como conciertos en vivo, tours gratuitos, nuevos lanzamientos de cervezas, degustación de cervezas y mucho más. Los clientes tienen una gran variedad de comida de la cual elegir. Buena comida, gran entretenimiento y muchas rondas de cerveza es de lo que se trata este lugar.
Kezar tiene todo lo que un pub normal puede ofrecer, además de que utiliza ingredientes sustentables y cultivados en la zona, y cuenta con grandes ventanales que dan a la bulliciosa actividad de Cole Valley. La comida la tradicional de pub, con hamburguesas, sándwiches (como el clásico de bacon, lechuga y tomate), ensaladas y aperitivos, además de algunos platos mexicanos como empanadas y quesadillas. A esto se añade una buena carta de vinos y cerca de quince cervezas de barril, este es un buen pub de barrio, en la parada N-Judah del metro de San Francisco.
Housed inside the lofty space that was once occupied by the iconic Jackson Brewery, Basil Canteen presents a very unique environment to enjoy Thai food. The urban and rustic settings, complete with bare brick walls, beams and high ceilings, make for a ideal venue for night outs with friends or family dinners. The well-conceived menu lists some of the best Thai dishes that are native to the street-stalls and kitchens of Bangkok, like Sikrong Mu Tod, Kiow Pu, Ka Mu Palo and the ever favorite Pad Thai. Eccentric cocktails like Tong Daend and Saketini are a must try for anyone who visits Basil Canteen.
No hace falta viajar al Sur Profundo de los Estados Unidos para experimentar una tradición culinaria que rara vez se ve en otros lugares. Tal vez por una buena razón. Este lugar fue catalogado por la revista Rolling Stone como "el mejor restaurante para comer salchichas con legumbres y escuchar música deep house", y sirve comida chatarra recalentada (macarrones con queso, papas fritas, platos precocinados, etc.). Aquí tocan DJs todas las noches y cuenta con una barra completa, música y mucha energía, que hacen que el lugar tenga una atmósfera ideal.
The quirky little bistro serves nouvelle American cuisine with an emphasis on seafood. Small and closely-placed tables make the dining room crowded but cozy. Appetizers are a sampling from the best of the San Francisco Bay. Crab cakes and Basque-style steamed mussels are a few of the many delectable choices. Dinner offers a choice of fresh fish custom cooked to order. A selection of wines, both Californian and French, are sold by the glass and the bottle and no corkage fees are charged on Wednesdays. Be sure to try their three course prix fixe menu served daily.
Located in the Mission District, The Hideout at Dalva is a covert bar within a bar at the corner of 16th and Valencia. This hidden gem is at the back of Dalva, through an unmarked door. Once inside, patrons will find an intimate area with low round tables, a rich red banquette and friendly mixologists who take their craft seriously. The cocktails found here are of the highest caliber, made with top shelf liquor, freshly squeezed juices and infusions. Be sure to visit early to avoid the crowds.
Perched conspicuously on a busy corner in San Francisco's Mission District, Elixir is a kind of Jack-of-all-trades of the bar world. They have an array of tap handles and they take great care to serve beers in signature glassware, yet they are also famous for their expertly mixed, fresh ingredient-filled cocktails. The ambiance is similarly shifty. By day, regulars pull up a stool and revel in the friendly pub atmosphere. In the evening, happy-hour hordes give way to scantily clad party people and the whole place suddenly feels chic. At all hours, the jukebox is great, and the dartboards are awaiting.
This is a no-frills dive bar popular with people of all ages. It is anything but pretentious and the mood is very casual. The drinks menu boasts of an interesting collection of wines, beers as well as cocktails at extremely reasonable prices. Whatever it is, it is a popular spot for some low-key fun.